Durante todo este finde he vuelto a recordar mi estadía en Popayán, por asuntos de trabajo que tiene para mi sabores tan dulces como los comunistas y liberales ( no, no se trata de partidos políticos, sino de dulces payaneses, que deben su nombre a ese color rojo encendido que tienen). Y es que estuve ahi compitiendo, si, como lo leen, compitiendo , en un concurso que ahora arranca su séptima temporada- en aquel año ibamos por la segunda-, y del cual he podido hacer parte en seis ocasiones- solo me perdí la quinta temporada-.
Ah, tiempos aquellos del 2003, que para mi fue un año profesionalmente hablando, de muchos éxitos. Evocar esas calles pequeñas de Popayán, la dulce Ciudad Blanca, me hace recabar entre miles de las sensaciones agradables que me deja cualquier viaje. Me doy cuenta que otros lugares evocan en mí algunos sabores, pero ninguno como el de Popayán. Y revisando las fotografías que ahora compartiré con vosotros, noto cierto toque sútil del aire payanés que se me vuelve indescriptible, que parecen ser la verdadera joya de aquel viaje. Porque, si de resultados hablamos, ese año, en ese concurso tan competido- participaron 30 Universidades, la mayor cantidad de toda la historia del evento, justo un año antes de que impusieran las semifinales escritas, asi que vale mas que el parecido con Eurovisión-, solo quedamos en una tibia posición de mitad de tabla para abajo, como nuestra invitada del día de hoy. Y es que en el concurso tambien tenemos nuestro "Big four" propio!.
Lo que más recuerdo de la capital del Cauca, son sus hermosos faroles en la noche, su silencio y quietud tan propios de una ciudad diminuta pero hermosa. Popayán respira cultura por todas partes, casi tanta como la milenaria Grecia, aunque no tenga la fortuna de tener playas como las del archipiélago heleno. Cuna de varias de las mentes más brillantes de éste país, y hasta la de los mas "locos" presidentes que hemos tenido- nada como recordar en los anales de la historia colombiana ese "Viva España" que dijo Guillermo Leon Valencia durante la visita a nuestro pais de nada mas y menos que de Charles de Gaulle - uno de los affaires diplomáticos mas risibles de toda nuestra historia republicana- . Aunque para algunos sea una ciudad rancia y de excluyentes abolengos, a nadie le queda duda de que en cada uno de sus rincones, se vive la historia de nuestro pais, historia viva gracias a tradiciones que sus pobladores han mantenido por siglos, pese a que la ciudad ha sido azotada por varios terremotos, el último de ellos en la Semana santa de 1983. Gracias a la tenacidad payanesa, la arquitectura de la ciudad permanece casi intacta.
Popayán es una ciudad casi perfecta. Su clima es templado, no hace demasiado frío, ni demasiado calor; es una ciudad tranquila, pero sin rayar en el tedio. Sus gentes - es una ciudad que no alcanza ni el medio millón de habitantes- son en general cultas y reservadas, sin llegar a ser parcas ni distantes. Y es armoniosa porque en su arquitectura hay, por sobre todo, ese blanco ritual, lo que la hace un espacio apto para caminar. Si, a Popayán hay que caminarla, beberse su belleza completamente, porque la historia habla en sus calles, su belleza está allí, ante los ojos. Aun en esas partes donde la reconstrucción de su legado se tardó mas en llegar, como la Iglesia de San Francisco, que tardó mas de 20 años tras el terremoto en ser completamente restaurada, solo se respira ese aire a ciudad del Renacimiento. Y es que eso es lo que ha hecho esta bella ciudad tras cada ataque de la naturaleza: renacer y renacer de sus ruinas.
Popayan tiene el mérito de haber sido declarada por la UNESCO como Ciudad de la Gastronomía , y con méritos, porque brinda platos para todos los presupuestos y de exquisita calidad, que algun dia espero volver a probar, ojalá en compañia de alguno de mis colegas eurobloggers - si me nombran Juez, creo que puedo pedir cupo cerca de Popayán-. Y este sería uno de los lugares donde ejercería mi labor, el Edificio Obando, que tuve la oportunidad de visitar y que es de una belleza tan indescriptible...
Pero no perdamos de vista a nuestra invitada eurovisiva de hoy, Mando, que tuvo a bien a representar a su pais, tras haberlo intentando con anterioridad. Y la verdad, qué poca justicia se le hizo a esta chica ese año, Casi tan poca como la tenia mi equipo en esos años de competencia, y que espero romper la tradicion con mi actual equipo.
Bueno, les dejo esta última postal de mi estadía en Popayán, junto con el tema de nuestra diosa griega, como un recordatorio de tantas bellas cosas en una ciudad a la que siempre me he prometido volver. ¿Alguno se apunta a acompañarme?.
Φιλιά και μια ευτυχισμένη εβδομάδα για όλους
Wendy
Ah, tiempos aquellos del 2003, que para mi fue un año profesionalmente hablando, de muchos éxitos. Evocar esas calles pequeñas de Popayán, la dulce Ciudad Blanca, me hace recabar entre miles de las sensaciones agradables que me deja cualquier viaje. Me doy cuenta que otros lugares evocan en mí algunos sabores, pero ninguno como el de Popayán. Y revisando las fotografías que ahora compartiré con vosotros, noto cierto toque sútil del aire payanés que se me vuelve indescriptible, que parecen ser la verdadera joya de aquel viaje. Porque, si de resultados hablamos, ese año, en ese concurso tan competido- participaron 30 Universidades, la mayor cantidad de toda la historia del evento, justo un año antes de que impusieran las semifinales escritas, asi que vale mas que el parecido con Eurovisión-, solo quedamos en una tibia posición de mitad de tabla para abajo, como nuestra invitada del día de hoy. Y es que en el concurso tambien tenemos nuestro "Big four" propio!.
Lo que más recuerdo de la capital del Cauca, son sus hermosos faroles en la noche, su silencio y quietud tan propios de una ciudad diminuta pero hermosa. Popayán respira cultura por todas partes, casi tanta como la milenaria Grecia, aunque no tenga la fortuna de tener playas como las del archipiélago heleno. Cuna de varias de las mentes más brillantes de éste país, y hasta la de los mas "locos" presidentes que hemos tenido- nada como recordar en los anales de la historia colombiana ese "Viva España" que dijo Guillermo Leon Valencia durante la visita a nuestro pais de nada mas y menos que de Charles de Gaulle - uno de los affaires diplomáticos mas risibles de toda nuestra historia republicana- . Aunque para algunos sea una ciudad rancia y de excluyentes abolengos, a nadie le queda duda de que en cada uno de sus rincones, se vive la historia de nuestro pais, historia viva gracias a tradiciones que sus pobladores han mantenido por siglos, pese a que la ciudad ha sido azotada por varios terremotos, el último de ellos en la Semana santa de 1983. Gracias a la tenacidad payanesa, la arquitectura de la ciudad permanece casi intacta.
Popayán es una ciudad casi perfecta. Su clima es templado, no hace demasiado frío, ni demasiado calor; es una ciudad tranquila, pero sin rayar en el tedio. Sus gentes - es una ciudad que no alcanza ni el medio millón de habitantes- son en general cultas y reservadas, sin llegar a ser parcas ni distantes. Y es armoniosa porque en su arquitectura hay, por sobre todo, ese blanco ritual, lo que la hace un espacio apto para caminar. Si, a Popayán hay que caminarla, beberse su belleza completamente, porque la historia habla en sus calles, su belleza está allí, ante los ojos. Aun en esas partes donde la reconstrucción de su legado se tardó mas en llegar, como la Iglesia de San Francisco, que tardó mas de 20 años tras el terremoto en ser completamente restaurada, solo se respira ese aire a ciudad del Renacimiento. Y es que eso es lo que ha hecho esta bella ciudad tras cada ataque de la naturaleza: renacer y renacer de sus ruinas.
Popayan tiene el mérito de haber sido declarada por la UNESCO como Ciudad de la Gastronomía , y con méritos, porque brinda platos para todos los presupuestos y de exquisita calidad, que algun dia espero volver a probar, ojalá en compañia de alguno de mis colegas eurobloggers - si me nombran Juez, creo que puedo pedir cupo cerca de Popayán-. Y este sería uno de los lugares donde ejercería mi labor, el Edificio Obando, que tuve la oportunidad de visitar y que es de una belleza tan indescriptible...
Pero no perdamos de vista a nuestra invitada eurovisiva de hoy, Mando, que tuvo a bien a representar a su pais, tras haberlo intentando con anterioridad. Y la verdad, qué poca justicia se le hizo a esta chica ese año, Casi tan poca como la tenia mi equipo en esos años de competencia, y que espero romper la tradicion con mi actual equipo.
Bueno, les dejo esta última postal de mi estadía en Popayán, junto con el tema de nuestra diosa griega, como un recordatorio de tantas bellas cosas en una ciudad a la que siempre me he prometido volver. ¿Alguno se apunta a acompañarme?.
Φιλιά και μια ευτυχισμένη εβδομάδα για όλους
Wendy
Hola Wendy. Me encanta Popayán, es una ciudad muy elegante con esos edificios coloniales tan maravillosos. Es una ciudad que destila glamour por todas partes, me encanta. Respecto a la anécdota del "Viva España" en la visita de De gaulle, te diré que en todas partes cuecen habas, aquí en España todavía provoca mofa la metedura de pata de nuestro entonces ministro de Defensa Federico Trillo y posterior presidente del Congreso de los Diputados cuando creo que fue en una visita a Guatemala gritó todo chulo "Viva Honduras" y se quedó tan pancho el tío.
ResponderEliminarRespecto al festival del 2003 es uno de mis favoritos junto con el del 92 y el de 1997. Me encantó el escenario y la organización.
Un fuerte abrazo.
Hola Wendy:
ResponderEliminarBonita ciudad Popayán y también me ha venido a la cabeza la anécdota que recuerda Miguel Ángel respecto a Trillo.
La actuación de Mandó tiene un encanto especial y fue uno de los temas que más disfruté en 2003.
Un besote
Kalispera, Wendy:
ResponderEliminarMuy hermosa tu descripción de Popayán, tan bien completada por esas lindas fotografías. No te quepa duda de que, antes o después, tus amigos eurobloggers organizaremos un viaje a Colombia para conocer Cartagena, Santa Fe de Bogotá, Popayán y, sobre todo, a ti. Eso si tú no te adelantas y decides acercarte a la Madre Patria.
Sobre Mandó (por cierto, gracias por el enlace), te cuento que soñé durante muchos años con que un día representase a Grecia en el ESC. Ellá fue sin duda la mejor voz de aquel festival celebrado en Riga. Sin embargo, no acertó en absoluto con la canción elegida, pues cambió su habitual estilo "ethnic" por una a balada a medio tiempo con la que, a pesar de todo, pudo demostrar sus dotes vocales con ese extraordinario agudo final.
Un 17º puesto absolutamente injusto para esta gran cantante.
P.S.: Mis felicitaciones por tus progresos con el idioma griego ;)
Σου στέλνω φιλάκια πολλά!
Buenas:
ResponderEliminarMe ha encantado Popayán, es precioso lo que nos enseñas en las fotos. Muy bien por la iniciativa.
En cuanto a Mando, Grecia'03 es todo lo contrario a España'03. Grecia presentó una gran voz con una mala canción y realizó una buena representación. Beth es todo lo contrario, incluso en las puntuaciones. Grecia mereció más y España menos, pero bueno...
La torta que se ha metido Soraya se la tenía que haber dado Beth. Pero en 2003, entre Birgitta y Super Sertab, pues es que no había puntos para todos.
Nos leemos
Bueno, chicos, publicamos nuevo post en breve, pero agradezco el gusto de su visita:
ResponderEliminar@ Miguel Angel: Conoces Popayán?. Porque, madre mía, parece como si ya hubieras pasado por alli. Y si, risible y todo, fue un menudo chasco en política exterior de nuestro mas loco ex-presidente que, justo este año, cumple 100 años de su natalicio.
Yo tambien adoro un festival como Riga/03. De hecho, ya le dedicamos toda una semana temática meses atrás. Un abrazo.
@ Dani: A mi me encantó la voz prodigiosa de Mando y no sé si has visto su vídeo promocional, ella en medio de un jardin, es simplemente hermoso, casi tanto como tu, mi bombomzote de Bilbao.
Un beso de chocolate.
@ Nikos: Te juro que en quien mas pensé al publicar esta entrada fue en ti, asi que el enlace no fue gratuito. Queria que descubrieras porque tus anécdotas de viaje me hacian recordar mi estancia en la bella "Ciudad Blanca". Y prometido, si venis a Colombia, seré vuestra guía. Espero tu lo seas de mi si llego a ir a Alcoy ( con una parada en Madrid y Bilbao).
Además, es que en tu post hay una cita de Mando que no he podido olvidar...Un besote de caramelo.
@ Grande grande: Que bueno que te haya encantado mi pequeña crónica del viaje a Popayán. Es impresionante la belleza de sitios como este que se pueden visitar a muy bajo precio.
Totalmente de acuerdo contigo. Yo bajaría a Beth a la decimaséptima posición, y subiría a Mando, porque se nota que la griega defensió su tema con lo mejor, no como Beth que con sus infames berridos se cargó un hermoso tema.
Los espero en el próximo post.
Wendy
Hola Wendy, no, no he estado en Popayán, lo que pasa que a mi que me gusta tanto la historia, no hace mucho en un programa creo que fue en el segundo canal de nuestra televisión pública dieron un programa sobre ciudades de la América colonial española y recuerdo perfectamente que me llamó la atención la ciudad por lo elegante y glamourosa que era. Sus edificios coloniales con ese estilo criollo tan característico recuerdo que me impactó en el reportaje.
ResponderEliminar@ Miguel Angel: Pues mira, qué bien que te haya encantado la Ciudad Blanca en un documental. Yo que la viví por 5 días no puedo dejar de recordar esos bellos días en tan encantadora ciudad. Ello me lleva a valorar aun mas los bellos sitios que hay en mi pais.
ResponderEliminarBesos de nuevo
Wendy