Cantar por no llorar

Hola a tod@s:
Se que algun@s de Uds. estareis esperando saber cómo me fue en el IX Concurso de DDHH, y la verdad, las noticias no son halagadoras: Lastimosamente, no solo no quedamos en una buena posición, sino que, para mas Inri, hemos quedado relegados de participar en 2012. La aplicación de la regla de que los últimos 10 puestos de la fase oral no puedan participar en el evento siguiente se ha aplicado y de la manera mas trágica en mi contra: De 24 equipos, los puntos, los cada vez mas exiguos puntos, nos han dejado en la vigesima cuarta plaza. Me siento tan humillada de ver que equipos con actos mucho peores que el nuestro nos han pasado en puntaje. Lo peor es que ni siquiera el memorial, mi mayor patrimonio, fue bien evaluado, de hecho, fue el peor puntaje de la clasificación general, y sigo sin entenderlo. Y la habitual tacañería en los puntajes de los jurados no se hizo esperar...

Qué dolor me produce saber que todos mis esfuerzos se han ido en vano. Y ms me duele por sentir que han quedado por los suelos los sacrificios de mis chicas, que soy testiga que fueron muchos. Lo dije antes, se los dije en persona, y no me cansaré de repetirlo en estas líneas: Gracias, mis chicas, por aguantarme mis verdes y mis maduras. Gracias por haber hecho realidad este sueño compartido. Gracias por no escatimar esfuerzos por hacer la puesta en escena tal y como yo la pensé. Hoy , vuelvo a sentirme la incomprendida. Siento que volví a fallarle a Adrianita y a Jorge Mario. Y eso me parte el alma. Probé fortuna de nuevo y volví a fallarles. Quedé tan absorbida por mi trabajo, que escasamente disfruté de la ciudad a la que llegué. De nada sirve que a las chicas que envié las feliciten los jurados en sus retroalimentaciones o que, mientras todos los otros equipos pedían y pedian prórrogas en sus intervenciones, porque no desarrollaban sus ideas en los 45 minutos reglamentarios, mis chicas jamás se pasaron de tiempo, por el contrario, les sobraba muchísimo tiempo, sin con ello descuidar el fondo de lo que decían. Los puntos han hablado, y nada tan contundente como un vigesimo cuarto lugar

En todo caso, yo ya no doy mas. Estoy harta de cambiar y cambiar y seguir cambiando de estrategias y me pasen por delante equipos regulares tres cuartos. ¿Para qué felicitan a mis chicas, si luego les dan puntajes de miseria?. Lo positivo es pensar que una de nuestras Universidades hermanas fue la ganadora del concurso. La Sede Bogotá, tras muchos años comiéndose últimos lugares ( en 2005, 2007 y 2009 estuvieron entre los dos ultimos puestos, y el año pasado tambien la relegaron), este año se alzó con la corona de laureles, para mi, muy merecidos, pues tuvieron galas muy bien logradas, aunque ellos no eran competencia directa nuestra, pues mis chicas eran representantes del Estado y ellos eran defensores de las víctimas. Pero ello no impide saber que todo mi trabajo de estos años tendra un hiato forzado.

Ya tan solo me queda de consuelo el haber sido ya nombrada Jueza en propiedad, no solo aquí en Bolivar, sino tambien en los dos tribunales mas importantes: Cundinamarca y Antioquia; muy a pesar del sabotaje ya sabemos quien. Ayer en la mañana visité la plaza que aspiro aceptar y sentí una paz tan grande, que la decisión es clara, y oportunamente se las comunicaré, así ello signifique lo que Uds. saben que significará.

Y bueno, pensando en delegaciones que cantaron en vigesimo cuarto lugar y quedaron en idéntica posición, siendo relegados de participar al año siguiente, ese puesto lo obtienen los representantes de Israel en Millstreet/93. Su tema שירו no contó con suerte y significó para los hebreos marginarse del certamen al año siguiente. En la irregular participación israelí en el Festival en los convulsos años noventas, fueron los Lahakat Shiru Group los encargados de llevarse el mal trago a casa, trapitos aparte.

Yo se que la constancia vence lo que la dicha no alcanza, pero el hecho es que sigen valorando a mis equipos muy por debajo de la calidad presentada. Y yo tal vez no quiera seguir esperando. Ya me siento cansada de asistir casi como mera comparsa. Tal vez ya me llegó la hora de dar el paso al costado, esta vez para siempre.



Besos a tod@s
Wendy