Si no está roto, no lo arregles

Hola a tod@s:
Tras un primer día laboral del 2009, que fue mas bien anodino, quisiera compartir con vosotros esta frase que escuché con bastante frecuencia en Panamá, y no solo en castellano, sino tambien en inglés (If ain’t broken, don’t fix it!) con la que titulo mi post del día de hoy. Y es que se aplica a tantos campos de la vida, al igual que al mismo Festival de la canción de Eurovisión. Concretamente, hoy me referiré a algunos de los menudos fracasos que se llevan ciertas delegaciones cuando envían por segunda o hasta tercera oportunidad a un mismo intérprete, a pesar de este haber ganado el Festival o de haber quedado en buena posición en sus primeras intervenciones.

Alguna vez, y creo que fue en mi post sobre Austria, cuando hablamos de Thomas Fosrtner, vimos cómo se puede pasar del cielo al infierno cuando de representar de nuevo a tu pais se trata, llevandote tremendos batacazos, algunos con mayor y otros con menor justicia. Pero ello no es nuevo en Eurovisión, y a continuación veremos varios casos y porqués:













Comencemos con el segundo Festival en celebrarse, Frankfurt/57, en el que los helvéticos pensaron en revalidar título con la gran Lys Assia, ganadora de Lugano/56. Sin embargo, en tierras alemanas la suerte no le sonrió y empató en penúltima posición con la delegacion belga. Y era entendible: Apenas estaba formándose en las agendas de las televisiones nacionales del entonces la idea de enviar un representante eurovisivo, y los suizos se decantaron por lo mas fácil que tuvieron a la mano, pero erraron esta vez. Con todo, Lys Assia volvería a ser la representante suiza en 1958 - se nota que no se esforzaban mucho en la tele suiza del entonces-, donde lograría una mejor posición. Apreciemos su tema de 1957, cantado en francés, y luego comentemos:
















Y si en lugar de ser tu segunda participación, era la tercera, y en ella te llevas un menudo y a mi juicio, injusto rosco, como les ocurrió a los italianos en Luxemburgo/66, pues aun peor se lleva el cabreo que te sacas. El tema Dio, come ti amo, que en el Festival de San Remo/66 defendieron el ya desaparecido Domenico Modugno y nuestra ya comentada y admirada Gigliola Cinquetti, no recaudó ni un solo punto, en medio de ese complicado sistema de votación del entonces, que generaba mas de un cero por festival en el marcador de las delegaciones. Y creo que fue injusto ese cero con este cantante, de tan buen porte escénico, quien tras ese sonado fracaso, sentenció que nunca mas volvería a Eurovisión , y hasta su muerte en 1994, así lo cumplió. Desde entonces, la conexion directa que había entre el tema ganador del festival ligur y Eurovisión se rompió...

















Pero lo que comentabamos en el caso de Lys Assia tambien se reflejó en mas de una delegación newcomer, aún en los años setentas. Y si, estoy hablando, de nuevo, de Israel, de la mano de la que fuera su primera participante eurovisiva, Illanit, que pasó de ser cuarta en su debut en Luxemburgo/73, a ser solo undécima en Londres/77 ( madre mía, al paso que voy, terminaré comentando todo este festival a plazos antes de terminar este año). A mi el tema me pareció bellamente interpretado, es mas, me gusta mas que el verbenero A-Ba-Ni-Bi que les representó la victoria en Paris/78, pero, bueno, ahi queda este tema en los registros históricos del Festival...















Bueno, llegamos a los ochentas, donde Eurovision entra en una etapa un tanto rara, y algunas delegaciones tambien lo hacen...incluso para verse tan anacrónicas y hasta decadentes como Luxemburgo en Dublin/81 ( otro Festival que estoy comentando a plazos). Y lo hizo de la mano de un otrora ganador del Festival, Jean-Claude Pascal, quien había vencido en Cannes/61, pero que ya en 1981, 20 años despues de su victoria, tenia un olor a rancio de aquí a Neptuno. El tema solo pudo ser undécimo, y es una pena que el final de tu trayecto eurovisivo - ya para ese entonces Pascal, quien falleciera en 1992, tenía en su haber 54 años encima- sea quedando tan relegado en puntajes.
















Y como cosa rara en estos posts sobre fiascos eurovisivos, entra nuevamente a colación Austria, de la mano de Tony Wegas, y su tema en Millstreet/93, Maria Magdalena. Y es que, como por variar en la delegacion austríaca, se llevan unos temas que a ratos suenan raros, y aunque Tony gozaba de simpatías tras su paso en Malmö/92, donde fue décimo; en el escenario irlandés no se capitalizaron en votos, acabando en decimocuarta posición entre 25 paises. Y es una pena por Austria, que venía ya del fiasco en Roma/91 del que ya habíamos comentado- que tambien fue una repitencia mas-, pero, sinceramente, la suerte muy poco les sonrie a ellos.


















Y así llegamos al actual decenio, donde encontramos a un guapísimo pero desafortunado Fabrizio Faniello, quien pasó de ser noveno en Copenhague/01, a ser último en la gala final de Atenas/06, muy a pesar de librarse de las semifinales de ese año, gracias al excelente lugar que otra repitente eurovisiva como Chiara había dejado en Kiev/05. Y la verdad, qué duda cabe de que fue mejor su tema en el escenario danés que este en territorio heleno. El vestuario de este chico tampoco ayudaba mucho, y ni qué decir de su voz, que no fue la mejor. Solo un puntito, dado, casi por conmiseración, por Albania, y condenando a su pais a volver a pasar por semifinales, que no han podido superar desde entonces. Aunque en el caso maltés- una de las delegaciones menos comentadas de este blog-, como antes dije en el blog de mi muy querido y apreciado colega Dani, el problema de la isla mediterránea es que la escena musical se ve algo reducida, y se vuelve medio cansino ver a los mismos con las mismas: Chiara, los hermanos Faniello, Olivia Lewis...en fin , así cualquier carrera eurovisiva se quema mas pronto de lo presupuestado...

Bueno, no todas las segundas partes son malas: Ahi tenemos ejemplos en Vicky Leandros, Carola, Dima Bilan, Helena Paparizou, Udo Jürgens y otros artistas a los que la segunda ( o la tercera) fue la vencida. Y ni hablemos de Johnny Logan...pero a la par de historias como estas hay tantas Charlotte Perrelli, Cochita Bautista, Serafin Zubirí y demás a los que un regreso al escenario eurovisivo solo les ha traído menudos fiascos o resultados aun mas pobres. Como para que ciertos Sakis Rouvas se lo piensen mas de dos veces...

Besos a tod@s

Wendy