La ley del vaso medio lleno

Hola a tod@s:
Yo se que hoy esperaban un corazón eurovisivo o el logo del Festival pertinente en el encabezado de este post. Pero, bueno, siempre es bueno salirse un poco de la rutina, ¿no?.
Para hoy no fue fácil decidirme entre dos canciones para ilustrar este post. Y esta vez, tendreis la oportunidad de conocer, en el post del viernes, cual fue la que quedó en segundo lugar. Para que hagais apuestas y especuleis, os dejo un dato: En el corazón eurovisivo que saldrá el viernes hay un color verde...¿alguien se arriesga a adivinar?.

Lo cierto es que esta semana , que había empezado algo baja de ánimos, poco a poco va subiendo. Y es que , cuando estás acompañada de un grupo de personas que te aprecian no solo como subalterna o superior juerárquico, sino como persona, las cosas fluyen, hay buena energía. El tema de estadísticas sigue siendo una preocupación, pero esta vez yo puedo hacer jugar a mi favor ese asunto. De otro lado, el mismo lunes pude ( por fin!) darle final al proyecto de una sentencia aduanera de mas de 3000 folios. Ayer martes, pude sortear con facilidad una audiencia que prometía ser un auténtico coñazo, rendir el informe de mas de 300 procesos y tramitar cuatro mas ( muy probablemente, los últimos de trámite que me asignen en este Despacho), y quedarme ya con una diligencia hoy miércoles y luego dos proyectos de sentencias por hacer. Lo justito, ¿no creen?. El punto es que hoy se define realmente cuantos días me restan para abandonar el cargo que ostento y entrar oficialmente en el paro, al menos, de aqui a que salga la lista oficial de cargos provistos ( es decir, con la asignación de despachos) de la que tanto he hablado en los últimos meses. Hoy es el día límite para que el primer lugar de la lista acepte el cargo en mi Despacho u opte a otro donde es tambien primer renglón. El rumor fuerte es que no aceptará en mi Despacho, sino en el otro, lo cual me daría otros ocho días mas de "vida laboral", habilitando así al segundo lugar, a quien desearía que lograse entrar en mi Despacho. Mas adelante explicaré porqué - y no, no es por la nómina, como creen mas de uno en el edificio-.

Pero, bueno, que me pierdo un poco. Esto de ver el vaso medio lleno y no medio vacío si que ayuda a cambiarle la perspectiva a las cosas. Por vía de ejemplo, mirad: si dejo de laborar desde el jueves, por ejemplo, y luego reentre en Junio ( segun mis cálculos), tendré un mes prácticamente para descansar, y eso que me vivo quejando de que mis vacaciones son muy cortas. En ese mes y pico, estaremos nada menos y nada mas que con las semifinales y la gran final de Oslo. Si ya no laboro, pues no tengo que pedir permiso para vérmelas desde el ordenador ( recordad que TVE Internacional solo transmite en directo la final, las semifinales las pasa en diferido, y para ahorrarme los comentarios malévolos de Uribarri, pues mejor lo veo de la web oficial de la UER, y todos tan anchos. Así, tal vez podríamos armar aquí una suerte de chat improvisado, como el que ya tuvimos la oportunidad de vivir, en la web de Dani, pero con las semifinales y la final, mientras esperamos que tanto nuestro querido bilbaíno como Manu se gozan el privilegio de verlo en vivo...eh, chicos, que os queremos ver en cámaras de la tele noruega, si las burbujas y el de los "defectos especiales" os-lo permiten...jejejeje... bueno, yo de momento lo dejo como sugerencia...

El caso es que debo ver este tiempo cesante pero con esperanzas de un nuevo empleo como una oportunidad de cambiar de aire, relajarme, hacer muchas cosas, sobre todo, estudiar, ya que tambien se viene un examen de otra ( si, OTRA) oposición en la que estoy inscrita, se nos viene la publicación del caso del VIII Concurso Universitario de Derechos Humanos ( si, voy a ver si lo intento por séptima vez), en fin, que, sin querer, veo que mi agnda para esos días incluye una variopinta de actividades que van desde bordar con Gina la ropita de su bebé ( gracias al "curso intensivo" que me dio mi abuela en Semana Santa), hasta la final eurovisiva...

Y por eso invito a estas líneas a nada mas y nada menos que a quien ostenta con orgullo el hecho de ser la primera representante eurovisiva de España. Si, la vibrante voz femenina de Conchita Bautista, quien, al igual que yo, resulta ser escorpiana del 27 de octubre!. Comentó ella alguna vez que, en Nápoles/65, a donde acudió a defender por segunda vez el pabellón español, pese a llevarse un cruel cero en el marcador, los periodistas se agolpaban en su camerino mas que frente al de la ganadora, France Gall. Además, en aquellas épocas eran tan frecuentes y muchas veces injustos los ceros, que la polifacética Conchita lo vivió como mera anécdota. Si no hay nada que se pueda hacer para revertirlo ¿para qué amargarnos la vida?.

Bueno, y con ella y su "Qué bueno, qué bueno" me despido por hoy, esperando que esta vez alguien haya aprendido a ver el vaso medio lleno.



Besos a tod@s
Wendy