Este jueves, un relato: "El arte de observar"

  "Foto cedida por ElSilencio en Devianart"

Hola a tod@s:

Cumpliendo nuevamente la cita con el relato de los jueves, a veces creo que la mejor fuente de inspiración -y la que mas tengo a la mano- es mi vida misma. Y bueno, qué mejor que ambientarla con los mas de mil temas que Eurovisión nos brinda; pues tenemos un doble diálogo entre el observar y el escuchar. Porque, mas que una competición de canciones, es todo un espectáculo visual digno de ser contado, y quien mejor para observar que alguien que ha dejado a la vista como titular y bandera de su blog...

Por mi parte, veo mi carrera hasta llegar a donde llegué profesionalmente hasta ahora como la escalera del cuadro, y  ella le cuento 20 escalones, casi el mismo número de sesiones que tuve que lidiar para llegar hasta donde estoy. Y si le sumara las etapas antes de aquel Curso Judicial y lo vivido tras él, sería una escalera infinita, plagada de escalones resbaladizos que casi me hacían flaquear y devolverme a la cola, la cola de quienes siguen siendo aspirantes, mientras yo ya no lo soy, a veces no se si decirlo si afortunada o desafortunadamente. Porque caminé, no sin antes flaquear muchas veces ante tantas injusticias, pero lo importante es que me esperó una puerta abierta al final del camino. A veces es bueno mirar atrás y saber de donde hemos venido y cual fue el precio que tuvimos que pagar para llegar hasta donde estamos...

Pero los caminos no culminan con esa primera puerta que alcanzamos, tras los escalones. Mi puerta no puede quedarse en esas lejanías que, a veces, parecen olvidadas, pero que son el extremo geográfico que el Destino a bien tuvo a darme, espero que como recompensa, tras subir los escalones. A veces me pregunto si elegí la puerta correcta. A veces, al pie de la ventana de mi Despacho, tomando el café de la mañana me pregunto si haber trucado el Destino a otras tierras, como tuve mas de treinta veces la oportunidad, sería mi felicidad o mi desdicha. A veces pienso que esperar tres años para pedir un traslado se me hará eterno, otras veces, veo el estante de mis libros y creo entender porqué debía llegar a donde llegué y lo que he logrado con ello. El conocimiento, y solo él, serán los que me permitan dar el salto que parece dudar en dar ese personaje en lo alto de la escalera, pero es que hay un foso en medio, un foso que bien podría hacerme resbalar y perder todo lo que logré ascender. No es hora de pasos en falso, tal vez se preguntará el personaje del final de la escalera. Y lo mismo pienso yo.

Donde observar debe ser todo un arte debe ser en Atenas, la capital helena, que acogió el Festival de Eurovisión 2006, y en él, la participación de Estonia, nuestro país invitado de hoy; en la voz de Sandra Oxenryd y su Through my window. Ella, a través de su ventana, no pudo ver el pase del pais báltico a la final que ganarían sus vecinos finlandeses, pero vosotros, a través de esta ventana, tal vez conozcais por vez primera el tema de ella, o muchos de mis ires y venires. Yo creo haberlo borrado de mis recuerdos, de tan anodino que me resultó: Había mejores temas que ver y oir, eso es mas que claro.

Este blog ha sido mi ventana al mundo, y con él os he dado la entrada a saber de mis saberes y mis dudas, de mis luces y mis sombras. Luces como la que iluminan al personaje que, atento en lo mas alto, parece esperar para dar el gran paso. Sombras como las de los que esperan aun en la parte lejana de la fila. ¿Pero culminará con ello su camino, o es apenas un nuevo comienzo?. Yo espero que esta etapa sea apenas la primera de muchas provechosas para mi. Que la corona que me ha sido impuesta como Jueza sea de laureles como a los atletas olímpicos, y no de espinas.  Y mientras tanto, habrá siempre alguien haciendo la cola, con mayor o menor impaciencia...

¿Y cual es la escalera que quieres subir hoy?

Besos a tod@s

Wendy